Amania J. Chartier Becherer

amania.chartier@gmail.com

Un mes antes de la fecha prevista ya quería nacer, soy una impaciente con muchas ganas. Cuando vi el panorama me decepcioné, imaginaba otra cosa. Así que decidí rebelarme, cuestión de carácter, me negué, desobedecí, hice lo contrario, me apodaron “Jojo la terrible”. ¡He ahí un nombre para una artista! Llevé mis huesos lejos del nido, hacia toda clase de experiencias “muy limite”, de niña salvaje, nada me atraía y aún menos los museos ¡que rollo!

 

 

Una decisión, un éxito

Beaux-Arts

Abandoné el colegio a los 16 años para adentrarme en el mundo laboral pero me daba cuenta que era demasiado atípica. Después de algunos años errando, conocí a unos jóvenes artistas y me sentí como pez en el agua, un amigo me hizo descubrir las Bellas Artes de París y allí supe que por fin había encontrado mi “sitio”. Fue una decisión instintiva, pensé “quiero ESTAR aquí”.

Aprobé el examen de ingreso a la primera, un milagro, “cuando te toca, te toca”, En mi carpeta había esbozos, bocetos de desnudos verdaderamente magníficos y algo en la mirada (según los examinadores).

Fue el principio de un aprendizaje lento y en ocasiones doloroso, tenía que aprender todo, entender; fue la pintura en sí misma la que me enseñó.

 

El Arte es un viaje y mis viajes hacen mi arte

Con veinte años conocí la obra de Gauguin. Para mí era un auténtico aventurero, un apasionado, una fuerza tranquila, un gigante que reafirmó su visión con potencia y sensualidad, me dio coraje y el placer de utilizar el color. Y como si fuera mágico, el destino me lleva por un viaje de 4 meses en Polinesia.

Gauguin – “The Loss of Virginity a.k.a. The Awakening Of Spring”

 

Un año mas tarde, los estudiantes del taller partimos hacia Venecia. Me enamoré de la ciudad al instante, despertó en mí una profunda nostalgia, ese conocimiento perdido del Edén, de esa felicidad que sólo encuentro a través del arte. Algunos meses más tarde me instalo en Venecia como estudiante y la historia del arte cae sobre mi cabeza como un mazazo “Mamma mia!”, sin embargo, al mismo tiempo es como vivir un sueño despierta…

Mappa di Venezia anno 1650

 

Durante mis dos años en la Academia di Belli Arti di Venecia (1988-1990), estudié escenografía pero sobre todo me adentré en el mundo mágico del grabado. Me gusta la pureza del negro de la tinta y del blanco del papel. Prefiero trabajar directamente sobre las placas de metal y dejar en ocasiones al azar o a la torpeza, sorprenderme. De Goya a Dürer, el trazo negro atrapa. ¿Por qué me fascina esa mujer en La Tempestad de Giorgione ? No me parece tan diferente y el hombre que observa, no es tan extraño. Finalmente, el tiempo es una ilusión y yo viajo dentro, fuera, sueño con pinturas, me sumerjo en el cielo estrellado de Giotto, le imagino con ojos azules y manos delicadas. Tengo tanta necesidad de tocar, es bonito para creer, el fresco es una materia tan exigente. Tarkovski es quien mejor lo expresa a través de Andreï Roublev todas esas emociones contradictorias y violentas que el alma y el cuerpo padecen frente a una obra que cobra vida, no hay piedad.

J.M. Alberola

La dura realidad, pero…

 

Debo volver a París para terminar mis estudios y pasar el examen final. Entro a trabajar en el taller de J.M. Alberola. Conocerle fue bonito, piensa que pinto de manera extraterrestre y eso me gusta. Siempre pensé haber aterrizado en Gaïa, no ser de aquí, estar sólo de paso. Es posible que también sea el caso de Yves Klein cuando nos sumerge en el “cielo infinito”, ¿había ya presentido el acceso a una cuarta o quinta dimensión? George Bataille educa mi vista, era para ver mejor y por lo tanto para ser vista. La visión de Paul Klee, su dulzura y cómo sus cuadros nos miran, fueron momentos muy estimulantes.

 

París, de la representación a las palabras

De vuelta a París, un año más tarde, me ocurre algo muy extraño: estoy en blanco, es el vacío, la nada, ninguna gana, ninguna inspiración… Abro las páginas de la poesía; para alguien que ha leído su primer libro a los dieciocho años es todo un logro, Beaudelaire, Rimbaud, Ponge, Guez Ricord… Las palabras emprenden un baile en mi cabeza y escribo algunos poemitas, algo locos, sobre lo femenino, la herida de la rodilla, lo húmedo, el caimán…

Caravaggio – “La morte della Virgine”

 

En 1993 me licencio, no tengo un lugar para trabajar, así que me instalo en el Louvre; genial como taller y empezó la copia de La morte della Virgine de Caravaggio, ese lugar, ese pintor ¡Qué experiencia! Toco su negrura y sus deseos de exceso, sus frustraciones de ser un visionario… En mi búsqueda de la luz, atravieso la oscuridad, porque es una necesidad.

Ese mismo año soy seleccionada por la organización “Life Art 93”, me traslado un mes a Suiza para participar en una subasta, bajo el patrocinio de Ivry Gitlis.

A mi vuelta a París expongo por aquí y allí. Entre mis viajes trabajo en un hospital en el servicio de oncología infantil, a los pies de la cama de los niños. De manera simple encuentro, de nuevo el placer de crear. La vida es un tesoro y el arte es también un gran apoyo, incluso puede que más…


Hay Caramba ¡ si Erasmus no existiría ¡

Construccion de Gaudi

En 1995 me mudo a Barcelona con una beca Erasmus. Empleo el tiempo deslizándome entre las construcciones de Gaudí y el Museo Picasso. Las obras de Picasso ¡me dan una energía sorprendente! ¡Es increíble las sensaciones físicas que producen!

Algunos meses más tarde, voy como artista invitada al sur de España, el evento está seguido de una exposición. Aprovecho para visitar Granada. Me encantaría vivir en esas pequeñas casas colgadas en la colina.

Cambio de decorado, voy a exponer en Bulgaria al Instituto Francés de Sofia; conozco al Presidente del momento: un refugiado norcoreano, mafioso, una alfombra que debería haber comprado. Bulgaria es tan caliente como un hierro rugiente…
El carácter solitario del taller ya no me satisface. Tengo ganas de trabajar con alguien. Es así como experimento el mundo de los eventos sociales, de la moda y del cine (realizo un cartel, escenografías para productos de lujo…). Además, descubro el mundo empresarial. Organizo talleres de “happenings”. Hago que conductores de autobús o ingenieros hidráulicos, que no han vuelto
a coger un pincel desde la guardería pinten un cuadro ¡Eso también es un logro artístico!


¿Espíritu eres?

“La deesse et le grain”

Han transcurrido diez años desde Las Bellas Artes. En ese momento descubro de nuevo el arte primitivo. Tengo la impresión de encontrar un sentido; algo visceral y esencial, una fuerte presencia de lo femenino, como con la Venus de Lespugece o la Diosa Madre reinando entre dos leones (Turquía). Las muñecas Hopi o las mascaras Yupik que también me hablan, oigo sus mensajes y los espíritus que las habitan. Estos objetos ostentan un auténtico poder. Han sido creados de manera intencionada para interactuar con el clan, el mundo y el universo, me hacen vibrar. No sé por qué, pero pienso en el libro de Kandinsky, “de lo espiritual, en el arte y en la pintura en particular” y entiendo algo de gran importancia para mí, a través del arte. Vivo una necesidad interior. Mi búsqueda es espiritual y es la luz lo que me atrae.


La reconexión

Gracias al libro de Olga Karitidi, La Chamán Blanca, se desencadenan en mí y en mi trabajo unas nuevas ganas y un largo viaje en tierras de Mongolia. Estamos en 1999, mi proyecto:

“La escultura nómada”

 

La escultura nómada es una obra itinerante y un documental de ficción. Imaginad un yurte, la casa de los nómadas, como un lugar de creación y de intercambio, trasladada en un carruaje tirado por caballos a través de la estepa. Lejos de todo, fuera del tiempo, cada intervención, cada palabra dicha, cada símbolo, cada cántico nos conduce hacia otra dimensión, para encontrar de nuevo los mensajes secretos que la tierra espera revelarnos. Lo que me gusta del documental es que, puedes adentrarte en el corazón de las cosas y acercarte a las personas. Ese mismo año, compro una cámara fotográfica digital, ¡qué maravilla! ¡Viva la era digital! por fin puedo crear un banco de imágenes y retocarlas, con total libertad, en mi ordenador. No me siento fotógrafa, más bien es la herramienta la que crea en mí, la necesidad, ¡qué riqueza!


Encuentro improbable

Don Patricio

Después de un aprendizaje a lado de diferentes directores de cine, es en México donde ruedo mi primera película. En 2005, en Francia, conozco a Don Patricio, un sanador Huichol originario de México. Algunos meses más tarde me reúno con sus aprendices para realizar un peregrinaje que se inspira en la tradición de los Huicholes. Voy como peregrina artista, filmadora y con mi bagaje espiritual.

En esta película hay un episodio que no pude filmar ya que fui la protagonista del suceso. Aquel día tuve una experiencia trascendental que no es posible grabar; como una suspensión del tiempo, un encuentro con el infinito, un momento de gracias recubierto de amor. Decido expresar ese momento a través de una instalación:

El tiempo suspendido

Gracias a la poesía de la materia y a la magia del arte, puedo recrear ese instante fuera del tiempo que sigue y vivo hoy en día.


Crear

Llego y paso mucho tiempo en Costa Rica, donde saco de la naturaleza una nueva fuerza creativa. Despacio, experimento el silencio que me alimenta de la cabeza a los pies “muy importante los pies”.

A través de la mecánica cuántica, muchas cosas que eran intuitivas para mí se explica, por fin. Las leyes del universo siempre habitaron mis creaciones. Hoy sabemos que el universo está en expansión, que es rellenado por vacío y que nosotros todos estamos vinculados. Somos creación y creador de esta ilusión maravillosa.

Amania Chartier – “Coeur vitrail”

Cuando creo un cuadro u otra cosa, estoy en contacto directo con mi Ser; materializando las informaciones que capto y que se cristalizan como formas en la densidad de la materia. Aunque la realización puede estar llena de imprevistos, he de tener el espíritu abierto y estar centrada a la vez. Porque más allá de la forma que aparece es transmitido un mensaje energético que actúa consciente o inconscientemente hacia el observador.
Crear es vibrar, es jugar con emociones que no siempre se conocen sus orígenes y todavía menos, sus destinos. Es liberarse, transformarse, curarse, todo es posible… Así como usted ve, me gustaría pensar que mis creaciones se dirigen a la persona, a su Ser profundo. Deseo encontrar en mi vida, personas, que, al igual que yo, quieren que el arte sea un momento de compartir, de alianza, y también un momento privilegiado consigo mismo. Una aventura interior.


Mi vida toma un nuevo rumbo…